Un amigo me escribía hace no mucho si no era irónico y sarcástico utilizar ritmos sudamericanos, de pueblos que fueron diezmados y masacrados en la Historia de Latino américa por "los españoles" para contra ponerme al nacionalismo catalán que al fin y al cabo también busca su independencia y su libertad.
Pero es que usar el estilo de folclore sudamericano para denunciar al nacionalismo catalán es algo que hago a propósito.
Y no evoco la época de la conquista, de la cual precisamente España acaso sea el país que mejor parado queda de la Historia de cada nación que ha sufrido o ha sido protagonista de un proceso de colonización y posterior demembramiento de las antiguas colonias. De hecho las grandes masacres de indios las hicieron los colonos que se quedaron tras sus respectivos procesos de Independencia, mucho que ver en el proceso de la Constitución de Cádiz de 1812, años previos y posteriores.
Precisamente mi interés no es esa época en que las grandes potencias exprimieron el Nuevo Mundo por América, África y Asia.
Es el movimiento revolucionario de los años 70 antes y después de Sudamérica, que utilizó el folclore magistralmente para denunciar los crímenes y abusos de las dictaduras que implantó EEUU para defenderse de la expansión soviética por esos países.
Cuando uso una Habanera para hablar de la violencia de Los Segadores y el sangriento himno, mi intención es llamar la atención sobre los dogmas, piedras angulares y símbolos "sagrados" e intocables en nombre de los cuales los nacionalistas están cometiendo en Cataluña contra los derechos civiles de muchísimas personas las tropelías que quien quiere puede conocer, y seguir a diario.
Cuando uso una milonga sobre un discurso de Artur Mas en el que proclama al pueblo catalán como "soldados derrotados de una causa inmortal" no hago mas que expresar eso: enseñar lo que son "milongas" y denunciar "la catalanización" forzosa a golpe de cayado ideológico que sufre el pueblo catalán, en el que puedo incluirme.
Y cuando uso un ritmo de chacarera para denunciar las persecuciones encubiertas que se efectúan entre la gente de la sociedad civil para imponer el modelo de sociedad uniforme, uso un ritmo también de llamada a tropa, de atención y a la unidad para combatir las injusticias por quienes hasta ahora han sido sujetos pasivos de ellas, enfrascados en la simple y ardua tarea de vivir y dejar vivir en paz.
Es una gota en el océano, que puede que no tenga repercusión, pero es mi sentir y el de mucha gente. Y todo tiene su razón de ser. Puede que obvie cosas que desconozco o puntos de vistas distintos, no digo que no, pero desde el sentido democrático, de nación, de tolerancia y de libertad que se nos inculcó desde que la democracia llegó a España, mis criticas van encaminadas hacia ese campo de denuncia.
No puedo evitar evocar a los cubanos eternos Pablo Milanés y Silvio Rodríguez, la argentina Mercedes Sosa, la chilena Violeta Parra, el mártir también chileno Víctor Jara, los Inti Illimani, los Quilapayún, los Calchaquis...gente de su tiempo que se levantó con su música y se puso de frente a la barbarie. Aunque no comparta muchas, o algunas de sus ideas, fueron personas valientes, que buscaban la justicia y admirables por su coraje.
SETZE JUTGES La noticia y foto de la niña llorando en brazos de los funcionarios del servicio de emergencia y lo vivido el 12O en la Plaza de Cataluña me ha encendido la bombilla, no se sí con éxito.
Aquí os traigo mi nueva canción, espero que al menos no os deje indiferentes.
http://www.youtube.com/watch?v=lm4Bre8ePQI&sns=em Els Setze Jutges (en castellano: Los dieciséis jueces) fue un grupo de cantantes catalanes fundado en 1961. El nombre proviene de un trabalenguas catalán muy popular ("setze jutges d'un jutjat mengen fetge d'un penjat", que se puede traducir como "dieciséis jueces de un juzgado comen hígado de un ahorcado"), denominación que nació de un cierto espíritu irónico y en reivindicación de la cultura catalana en aquellos años de la dictadura franquista. Durante la Guerra de Sucesión, en 1714, que originó la abolición de los fueros con el decreto de Nueva Planta de Felipe V, los catalanes que participaban en las guerrillas se servían de un santo y seña para desenmascarar a los impostores. A cualquier sospechoso que se hiciera pasar por natural del país y amigo de la causa, le obligaban a recitar este trabalenguas: "Setze jutges d'un jutjat mengen fetge d'un penjat". Repítalo, le decían, encañonándolo con el mosquete. Si el prisionero no sabía recitar esa frase de corrido y sin acento castellano lo tenían por espía y a continuación lo fusilaban. Esta estratagema ya había funcionado en la revuelta dels Segadors, en el siglo XVII. Ambas guerras fueron perdidas, pero los catalanes extrajeron de ellas su himno y su día patrio. Más o menos como cuando en la posguerra nos cuentan que un falangista podía encañonar a un sospechoso de algo (donde fuese de cualquier lugar de España) y hacerle cantar el Cara al Sol. Lo que son las cosas, los métodos de represión no son nuevos del SXX. Hoy, los Setze Jutges están por todas partes. Quedó patente la intención y mentalidad del nacionalismo catalán y catalanizador cuando puso en servicio bajo el virreinato de Pasquall Maragall I las famosas y siniestras oficinas de delación lingüística de la Generalitat. También se hicieron públicas listas de productos no catalanes para elegir mejor la compra y no equivocarse. En la escuela los Setze Jutges no han faltado dosificando su catalanizacion gota a gota o manguerazo a manguerazo, tanto que hasta la consellera de Governació Sra Rigau lo encuentra normal y se siente orgullosa. Los Setze Jutges aparecieron este último 12 de Octubre en la Plaza Universidad juzgando y declarando culpables a un padre con sus hijos porque llevaban una bandera española para celebrar la fiesta de la Hispanidad, agrediéndole y haciendo a las criaturas pasar un auténtico mal rato. No iban a consentir que quien no supiese el trabalenguas de corrillo pasase el juicio sumarísimo. Y así hemos estado dando nuestro hígado necrósico a comer a estos Jueces. Nos lo han ido royendo hasta que han creído tumbarnos definitivamente. Por suerte el hígado es de los pocos órganos que se regenera, y por suerte este muerto esta muy vivo. Setze jutges Antonio Juliá, 14/12/2012 Setze jutges d'un jutjat mengen fetge d'un penjat; Setze jutges d'un jutjat mengen fetge d'un penjat; mengen fetge, mengen fetge mengen fetge, d'un penjat; fetge fetge fetge I sang d'una Espanya badallant milers de llanols trancats cap a cassa coixejant nens y nenes van plorant dels seus pares arrencats Ara toca fetge i sang Ara toca senyalar Setze jutges tornaran Famolencs de fetge i sang Els cervells escampats d'una gent que ha de martchar Odio y manos rojas son Las que no queremos no Manos blancas surgirán Regalando seso y paz Seso, paz y corazón Con la reconciliación Setze Jutges nunca más ni penjats ni ajusticiats Igualdad y dignidad Para todos Libertad Para Todos Libertad Ciudadanos libertad TRADUCCIÓN siete jueces de un juzgado Comen hígado de un ahorcado Comen hígado comen hígado Comen hígado de un ahorcado Hígado hígado hígado y sangre De una España bostezante Miles de rodillas rotas Hacia casa cojeand Niños y niñas llorando De sus padres arrancados Ahora toca hígado y sangre Ahora toca señalar Dieciséis jueces volverán Hambrientos de hígado y sangre Los sesos desparramados De los que se han de marchar Odio y manos rojas son Las que no queremos no Manos blancas surgirán Regalando seso y paz Seso, paz y corazón Con la reconciliación Setze Jutges nunca más ni penjats ni ajusticiats (ni ahorcados ni ajusticiados) Igualdad y dignidad Para todos Libertad Para Todos Libertad Ciudadanos libertad
http://www.vozbcn.com/2012/05/03/111951/gimenez-barbat-citileaks-ciudadanos/comment-page-1/#comment-264151
COMENTARIO PUBLICADO EN LA VOZ DE BARCELONA.
Toda la historia del surgimiento de C’s fue como un parto que sufrimos todos cuanto participamos en él. Pero al final salió adelante y eso es lo que cuenta.
Ahora desde la distancia creo que podemos mirar con cierta condescendencia y escuchar con mas tranquilidad lo que tengan que decir quienes estuvieron en la almendra de la cosa en aquel momento, no creo que merezca la pena contestar muchas obviedades y datos y hechos que pueden ser fácilmente contrastados por quienes estuvimos allí.
Una curiosidad. Maria Teresa promovió Ciudadanos de Cataluña y los primeros foros donde todo el mundo escribía anónimamente al principio. Era lógico, muchos nos acercábamos espontáneamente y con bastante temor e inexperiencia politica. En aquellos lugares fue donde nos encontramos todos quienes sabemos de que va todo esto. Ella estuvo en la organización de todo el movimiento ciudadano cuando este apenas era nada. Una de las primeras cosas que hicimos todos, no se si somos conscientes de ello, fue salir del anonimato y funcionar como una organización de personas con nombre y apellido. Opinar con nombre y apellido.
Cuando leo los comentarios de LvdBcn me parece estar en aquel foro incipiente. Me da la sensación de haber retrocedido mucho en algo que habíamos ganado y que nos fortalecía como colectivo: la fuerza de la unión y la falta de temor a ser reconocidos por lo que dijésemos. Aunque sea un medio publico y no un foro cerrado. El endemismo mo es bueno ni sano. Debe correr el aire.
Sobre todo el movimiento ciudadano que nació con el primer manifiesto mi pena es que no hayamos sido capaces de consolidarlo en toda España. Y tengo mi opinión, no sostenida con hechos, por desgracia, pero fruto de observar y reflexionar todo este tiempo.
Sospecho que no interesa un movimiento socialdemocracia pero sin complejos en proclamarse a favor de políticas liberales cuando sean necesarias. Y sospecho que no le interesa precisamente al partido socialista, ni a cualquier persona muy afin al PSC PSOE que tuviera poder para influir en C’s. De otro modo no me lo explico. Cuando esto surgió nuestra idea estaba en condiciones de correr como la pólvora encendida y se frenó, básicamente por el debate ideológico.
Pero no hemos acabado. Estamos ahí y tenemos que seguir estando. A pesar de todo, todos tienen su pedacito de gloria en esta historia y algo de que estarles agradecidos. Lo malo ¿Pa que?
Antonio Juliá